Las horas que anualmente se pierden en los atochamientos viales (o tacos) es cada vez mayor en diferentes ciudades del mundo y no solo en Estados Unidos como uno se podría imaginar.
De hecho, en Estambul los automovilistas pierden 110 horas cada año únicamente producto de la congestión vial y en las nueves ciudades más congestionadas de Estados Unidos, son alrededor de 42 horas, según el Índice de Tráfico TomTom.
Este problema no surgió de la nada sino que es consecuencia del diseño que durante las últimas décadas se ha privilegiado en las ciudades y que ha sido centrado en el automóvil y con más proyectos para aumentar su infraestructura pensando que así se va a solucionar.
Sin embargo, hay ciudades que han decidido enfrentarlo, pero con una solución que responde a otro enfoque, poniendo en primer lugar la movilidad sustentable. Para conocerla, el centro de soluciones de Transporte de Xerox escogió cuáles son las siete causas más comunes de la congestión vial y cómo distintas ciudades han desarrollado diversos proyectos en respuesta a éstas (y con resultados positivos).
Causa Nº 1: La capacidad vial está sobrepasada
Las calles fueron diseñadas para recibir una capacidad de autos en particular, pero cuando ésta se excede, colapsan.
En Singapur, decidieron que iban a implementar dos medidas para desincentivar el uso de los autos. Primero, invertir en transporte público, y segundo, aplicar tarificación vial.
Respecto a la primera, lo que se hizo fue aumentar el número de servicios en distintos medios (buses, metro y recorridos marítimos), en tanto, la segunda consistió en establecer impuestos no solo para ingresar al centro, sino que en varias de sus avenidas principales.
Como resultado, el 48% de los viajes que se realizan en la ciudad son en transporte público y la propiedad de automóviles bajó en un 0,18 per cápita.
Causa Nº 2: No existen alternativas reales a conducir
En aquellos sectores donde no hay servicios de transporte público, muchas veces alejados de los centros urbanos, sus habitantes son más dependientes de los automóviles para desarrollar sus rutinas. Para evitar que esto se mantenga, en ciertas ciudades están impulsando otros medios accesibles y con buenos resultados.
En este sentido, la publicación destaca lo que ha hecho Paris con su sistema de bicicletas públicas, Velib, y con su servicio de autos compartidos (car-sharing), Autolib, que cuenta con una flota de 2.000 vehículos eléctricos que han permitido reducir el uso de 22.500 autos particulares.
Por último, lo que ha hecho Portland, en Estados Unidos, también es digno de destacar. Aquí a inicios de los ’90 se empezó fuertemente a invertir en infraestructura ciclista y ahora la ciudad es reconocida como una de las más amigables del mundo con las bicicletas.
Causa Nº 3: Peajes en efectivo
El sistema de pago televía, conocido en Chile como tag, está en funcionamiento desde 2012.
En la publicación este sistema es destacado no solo porque permite evitar los tiempos de viajes y los accidentes, principalmente choques por alcance, sino porque permite evitar un 20% de las emisiones contaminantes en comparación con los pagos en efectivo.
Causa Nº 4: La conducta de los automovilistas
Crear las condiciones para que los conductores transiten a una velocidad adecuada es posible con la instalación de resaltos en la calzada.
Según se menciona en la publicación, estas pequeñas intervenciones traen grandes beneficios, entre ellos, evitar el riesgo de accidentes, reducir las emisiones contaminantes y una regulación dinámica del tráfico.
Esto último significa que varias reducciones de velocidad ubicadas a cierta distancia son más eficientes para el flujo de vehiculos que una frenada repentina.
Causa Nº 5: No se prioriza el transporte público
En muchas ciudades los buses del transporte público deben circular junto con los vehículos particulares, a pesar que llevan a muchos más pasajeros. En Curitiba la situación es diferente desde 1974 cuando se construyó el primer corredor de buses, por lo que desde entonces destaca por priorizar los medios de transporte sustentables.
Incluso, en diciembre de 2015 fue reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como un caso exitoso de reducción de contaminación ambiental por “implementar políticas que prioricen el transporte rápido, a través de inversiones en el transporte público y la construcción de redes seguras para ciclistas y peatones”, y por “aplicar exigencias más estrictas para reducir las emisiones generadas por vehículos impulsados por combustibles fósiles”, entre otros motivos.
En la publicación del centro de soluciones de transporte de Xerox también se destaca lo hecho por la ciudad debido a que transporta a 2,3 millones de pasajeros diariamente y la mayoría tiene una parada a no más de 400 metros.
Además, se estima que con su implementación se ha evitado 27 millones de viajes en automóviles anualmente.
Causa Nº 6: Los semáforos no están optimizados
Una causa de la congestión esta dada por los semáforos que no están coordinados para ajustarse en tiempo real. En Los Angeles, Estados Unidos, los semáforos sí poseen este sistema y producto de esto se ha podido reducir los tiempos de viaje en un 13 por ciento.
En otras ciudades, como San Francisco y Amsterdam, la estrategia también se ha implementado, pero orientada en los ciclistas y el transporte público, respectivamente.
En la primera, los ciclistas pueden mantener una velocidad constante en la ruta, mientras que en la segunda, los tranvías han reducido los tiempos en un minuto y medio, y el de los buses en tres minutos.
Causa Nº 7: Automovilistas que buscan dónde estacionar
Esta causa es real y de hecho está comprobado que un 30 por ciento de los automóviles que son parte de un atochamiento están buscando un estacionamiento.
Nuevamente en Los Ángeles destaca una medida aún en fase piloto en la que si bien no se eliminan los estacionamientos en superficie, algo que sí están haciendo otras ciudades (conócelas acá), busca desincentivar el uso de este medio de transporte.
Esta consiste en aplicar una tarifa dinámica en el costo de los estacionamientos para que entre un 10 y 30 por cientos de éstos se mantengan libres durante el día.
Durante las pruebas, este programa empezó a demostrar buenos resultados, entre ellos que se alcanzó el mencionado 10% y que un 76% de los conductores que sí se estacionaba en las zonas incluidas con esta tarifa dejó de hacerlo.
La publicación la puedes descargar aquí.